"San viernes , bueno y mártir..." dicen los compañer@s al despedirse los viernes a la hora de la salida del cole.
Cada cual organiza su atril y con toda la dignidad posible, sale en busca de un poco de relajo y disfrute que dios mediante, se le pueda arañar al fin de semana.
Tarea cumplida una semana más y cada mochuelo a su olivo.
No sabría decir -sinceramente- si la batuta se nos cae los viernes o la dejamos recogida con todo el cariño, en su cajita de madera, para retomar la tarea nuevamente el lunes.
En cualquier caso, cuerda, percusión, viento, metal, madera, etc... no faltarán a su cita y tendremos que tomar la batuta donde la hayamos dejado -llueva o nieve-, para retomar los ensayos justo donde los habíamos dejado y transcurrirán -si nada lo impide- otros cinco días más, que nuevamente harán santo al viernes.
Cada cual organiza su atril y con toda la dignidad posible, sale en busca de un poco de relajo y disfrute que dios mediante, se le pueda arañar al fin de semana.
Tarea cumplida una semana más y cada mochuelo a su olivo.
No sabría decir -sinceramente- si la batuta se nos cae los viernes o la dejamos recogida con todo el cariño, en su cajita de madera, para retomar la tarea nuevamente el lunes.
En cualquier caso, cuerda, percusión, viento, metal, madera, etc... no faltarán a su cita y tendremos que tomar la batuta donde la hayamos dejado -llueva o nieve-, para retomar los ensayos justo donde los habíamos dejado y transcurrirán -si nada lo impide- otros cinco días más, que nuevamente harán santo al viernes.
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